
Todas esas voces
Todas esas voces
perdidas en un océano eléctrico,
todos esos ecos
retumbando en las montañas.
La música sigue, pero
¿quién queda para escucharla?
Sólo los gusanos
que devoran los cuerpos
y los roedores
que se roban los huesos.
que devoran los cuerpos
y los roedores
que se roban los huesos.
Tu amor
Recuerdo al sol
calentando mi cara
con los ojos cerrados.
Y también al viento
susurrando en mi oído
pequeños poemas
y al río
corriendo travieso
de piedra en piedra.
Olvídate de mí
de mi cara, de mis ojos.
Olvídate de todo
de las tardes y los besos.
Olvida ya eso
y deja que hoy
te explore de nuevo.
Más allá
Más allá de todo,
de las miradas de la gente,
de los desiertos del porvenir,
de las cadenas y los fantasmas.
Más allá
se quedan
los besos tibios
y las miradas eternas.
Más allá me llevaste
con tus ojos de niña
y tus caderas de mujer.
Más allá me dejaste
volando bajo,
entre pilotos automáticos
y estrellas del amanecer.
Ahora,
mientras la noche se desvanece,
me pierdo
como la luna
con la salida del sol.
Sin semblanza.